Para socializar una propuesta de iniciativa privada que prorroga por 30 años la concesión de los siete peajes que hoy recauda la criticada Autopistas del Café, a finales del año pasado se hizo una ronda de reuniones en Chinchiná, Santa Rosa de Cabal, Pereira y Armenia, esta vez, para obras de desarrollo vial teniendo como eje la carretera que une a Calarcá Quindío con La Paila Valle.
El proyecto Conexión Centro plantea esa concesión con el objeto de desarrollar una autopista con especificaciones 5G modernizando el corredor vial entre el puerto de Buenaventura y Bogotá, con indiscutidos beneficios para el transporte de carga, la economía y obviamente el mejoramiento vial del país.
Pero, aun así, varios importantes sectores de opinión inicialmente unos más exigentes que otros, entre ellos la veeduría cívica de Autopistas del Café y el Comité Intergremial de Caldas, encontraron inconveniente la propuesta original y pidieron a la Agencia Nacional de Infraestructura ANI, la reformulación del proyecto.
La noticia es que el pasado jueves 18 de enero hubo una reunión en la que tanto el Comité Intergremial de Risaralda como Andi y la Sociedad de Mejoras de Pereira-ProRisaralda (criticados organismos que no parecían defender los intereses regionales), y otros como las asociaciones de ingenieros, de arquitectos, Fasecolda, Analdex, Anato, Fenavi, Lonja de Risaralda y las universidades Libre, Católica y Areandina, firman de puño y letra un extenso documento reclamando que la propuesta incluya las grandes obras de desarrollo vial que en el caso de Pereira y Dosquebradas, se requieren.
El documento, que recomiendo leer en su totalidad en www.GQtucanal.com ya fue radicado en la ANI, cuyo presidente Francisco Ospina Ramírez y el vicepresidente de Estructuración Vial, Jonathan Bernal González, quedan informados de las seis grandes obras que Risaralda condiciona en el proyecto Conexión Centro, entre ellas:
Construcción en doble calzada completa en la variante Condina desde Punto 30 hasta la Intersección Consotá en la Av. Sur; ampliación del tramo vial Punto 30-Terminal de Transportes con la construcción de un tercer carril o un par vial; Ampliación de la Intersección Belmonte (El Pollo); estudios y diseños para la construcción de la conexión vial más eficiente Pereira-Dosquebradas; construcción del proyecto de conexión vial Pereira-Dosquebradas; y construcción de la Variante Oriental.
Tanto el Gobernador Juan Diego Patiño como el alcalde Mauricio Salazar han expresado en diferentes escenarios las soluciones viales que propone este grupo de entidades, pero sorprende que allí no estén, entre otras, las Cámara de Comercio de Pereira y Dosquebradas.
El proponente originario de la nueva concesión es la musculosa firma Odinsa, filial del gigante Argos, empresa de la organización GEA (Grupo Empresarial Antioqueño). Desde hace casi una década, Odinsa es propietaria de Autopistas del Café, empresa que tiene una enorme deuda social, de infraestructura vial y de elemental respeto con las comunidades e incluso con el periodismo de los tres departamentos del Eje Cafetero.
No obstante, por diferentes motivos, en la propuesta de Conexión Centro, Odinsa ha tomado distancia de Autopistas del Café, que en las socializaciones recibió todo el palo que merece. La gente guarda pan, para cuando haya leche.
Lección aprendida: Para bien o para mal, cuando los candidatos en campaña política proponen obras como la Av. Los Colibríes, los ciudadanos creen que eso es carreta y no paran bolas. Igual ocurre cuando grandes empresas privadas proponen obras de concesión como Autopistas del Café y Conexión Centro, que no son obras de beneficencia ni concesiones gratuitas porque se pagan en los peajes con el bolsillo de los contribuyentes.
A Autopistas se le vence la concesión en 2027 y es posible que veamos qué pasa. Pero si Odinsa materializa su propuesta a 30 años, muchos no veremos el desarrollo y el final, pero eso sí, las futuras generaciones sabrán si tragamos entero, o si fuimos o no leales y superiores a nuestras responsabilidades.
Como dice la voz chillona del circo de los Hermanos Gasca: “Después no digan que no se les avisó”.
