Nadie discute que Pereira es una región atractiva por su potencial turístico, comercial e industrial. Lo mismo y con mayor razón, se predica de Cartagena cuyo posicionamiento no admite comparación en esos frentes de la producción económica.
Pero vean esto: en un plan de coalición regional, el pasado 24 de mayo en Montería se creó la Liga de Alcaldes del Caribe que en plena reunión se quedó corta porque se sumaron varios gobernadores y empresarios, lo que sobre la marcha les obligó a llamarse Liga de Gobernantes del Caribe.
El objetivo inicial, como lo dijo el alcalde de Cartagena, Domek Turbay es hacer un paquete de oferta turística regional a todos los países del Caribe y Centroamérica.
“Reclamar lo justo” a la luz de la autonomía territorial, es el otro objetivo que en la región caribeña se proponen como Liga.
En el auditorio del Areandina estuve en 2006 en una “cumbre” de oficinas de turismo de Manizales, Pereira y Armenia (siempre se olvida a Cartago pese a su conexión con Quindío y Risaralda). Se propuso una alianza estratégica soportada en una bolsa de dinero para promoción internacional del paquete turístico del Eje Cafetero con énfasis en EE.UU.
La iniciativa gustó y nada había por discutir sobre las bondades de la oferta que tiene nuestro turismo regional. El entusiasmo terminó cuando las respectivas alcaldías dijeron lo que podrían aportar a través de las oficinas de turismo.
Armenia nos tapó la boca cuando dijo que aportaba $2.500 millones que tenían presupuestado para promoción turística. Ni Manizales ni Pereira llegaban al 25%. Hasta ahí fue la reunión. Y hasta hoy, jamás nadie volvió a hablar del bendito paquete de promoción turística del Eje Cafetero.
En 2007 viví la experiencia por siete años de ser gerente nacional de Comunicaciones y luego de Servicio al Cliente en La Previsora Cía de Seguros donde todos querían saber sobre el Eje Cafetero. La simpatía por esta región es tal que Imagino a todo risaraldense en Bogotá en la misma situación. Igual pasa cuando uno viaja al exterior.
De lo que carecemos es de estrategia y plan de marketing de alto vuelo con recursos robustos para promocionar con impacto y cobertura -así sea por oleadas- el desarrollo turístico que hemos alcanzado y la valiosa sociedad que somos. A futuro los buenos resultados terminarán por autofinanciarlo.
Por supuesto que más allá de la insular intención de un alcalde o gobernador, es difícil y costoso hacer mercadeo y publicidad internacional sostenible en el tiempo, pero, ni sombra de un plan regional al respecto.
Lo que tenemos que mejorar es el vuelo, y afinar el ojo de águila que decimos tener porque a Pereira nada le queda grande y lo que nos falta por hacer, es mucho.
